Ontogenia de la conducta (El origen del Ser)
Ontos = Ser
Génesis = Origen Creación
El comportamiento estará influenciado por dos factores básicos uno es el genotipo por lo que entender la genética del comportamiento es imprescindible, y el segundo aspecto es el medio ambiente, algunos autores han establecido un porcentaje de influencia a cada factor, sin embargo esta influencia es muy variable dependiendo de las cargas genéticas de cada individuo y las experiencias ambientales que cada perro haya vivido.
Los cambios en el desarrollo de la conducta pueden variar por cuatro factores básicos, el primero es debido a la maduración de sistema nervioso, ya que los perros son considerados altriciales (nacen con un sistema sensorial y motor relativamente atrasado), a diferencia de las especies precociales ( nacen con su sistema sensorial y motar desarrollado), los ungulados son un buen ejemplo, los becerros, por ejemplo comienzan a caminar poco tiempo después de nacer, esto garantiza que no serán presas fáciles de los depredadores además que podrán seguir a sus padres durante las grandes migraciones. El segundo aspecto que influirá en el cambio de la conducta es el aspecto endocrinológico en donde un buen ejemplo son las concentraciones plasmáticas de hormonas sexuales cuando el perro llega a la pubertad y se aprecian las conductas sexuales dimorficas. El tercer aspecto a considerar es el proceso de aprendizaje en donde la exposición a las experiencias y sus respuestas provocaran un cambio en la conducta. Por ultimo la conducta del perro se modificada por el proceso natural de envejecimiento del sistema nervioso central, y los órganos efectores.
Aunque ya tratamos anteriormente el tema relacionado al desarrollo conductual lo analizaremos mas profundamente, cabe mencionar que la importancia del estudio y análisis de la ortogenia fue estudiada primeramente en humanos. La Psicología se dice que se estudia antes de Fraud y después de Fraud, aunque hoy en día muchos de los postulados de Fraud son muy cuestionables es un echo que fue quien primero estableció la premisa que dice así; Cualquier trauma ocurrido durante la infancia puede ocasionar sicopatología en la viuda adulta, esta premisa es perfectamente valida en el caso de perros y gatos ya que muchas de las sociopatias tienen sus orígenes en los periodos sensibles del desarrollo conductual.
Algunos investigadores (Jankins, Funtional mammalian Neuroanatomy, first edition) observan las estructuras cerebrales bajo microscopios muy potentes y colocan electrodos en varias regiones del cerebro para registrar su actividad mientras que los animales están efectuando funciones como escuchar, aprender o encontrase en interacciones sociales, en otros trabajos se electro estimula ciertas áreas del cerebro con corrientes eléctricas débiles (por ejemplo si una parte del cerebro de un gato, como el hipotálamo es lesionado de manera bilateral ventrodorsalmente produce un apetito voraz, mientras que si se lesiona bilateralmente en la parte lateral extrema produce anorexia. Por lo que se puede decir que esta región es centro importante en el control del comportamiento trófico).
El patrón de desarrollo de varios centros cerebrales esta bajo un control genético. Este control el cual a evolucionado durante miles de años es tal que el animal para percibir, responder ya adaptarse anticipadamente a condiciones y circunstancias del medio ambiente. Así desde el nacimiento el cachorro está dotado con censores bien dotados con los cuales es capaz de localizar el pezón y succionarlo. Este es un buen ejemplo de un comportamiento no aprendido y genéticamente programado de un instinto o una predisposición o habilidad innata. Se da un mejoramiento en la localización del pezón así como en la eficacia para succionarlo debido a la experiencia o al aprendizaje, que frecuentemente, es una clase de condicionamiento a los olores ( por ejemplo el olor del aceite de la semilla de anís se ha utilizado en este condicionamiento en donde los cachorros son capaces de seguir este rastro para alcanzar el pezón de la madre). Algunas acciones como el succionar un pezón requieren muy poca experiencia, no así otras acciones mas complejas en donde se requiere de mas experiencia y se encuentran menos controladas por los instintos. Konrrad Lorenz usa el termino “entrenamiento del instinto”, cuando una predisposición a responder a una experiencia es moldeada por la propia experiencia. Como seguir una pista diferenciándola de otras; la capacidad de un eficiente acecho, matar o disecar a la presa, son buenos ejemplos de ese “entrenamiento”. La predisposición innata a seguir un rastro oloroso y mover pequeños objetos se observa fácilmente en los cachorros cuando juegan y exploran. Estas actividades expuestas a las experiencias adecuadas benefician mejorando la capacidad de seguir a un animal y cazarlo.
Se debe mencionar otro aspecto de interés. Si el cerebro del perro adulto es privado de oxigeno durante cinco o diez minutos, se puede presentar la muerte o un daño permanente, pero el cerebro de un cachorro recién nacido es mas resistente. En la Republica Checa se encontró que el cerebro de un cachorro es tres veces mas resistente que el cerebro de un perro adulto y el de un cachorro mayor de cuatro semanas es igual de resistente que el cerebro de un adulto. Esto significa que el cerebro del neonato esta protegido de los efectos deteriorantes de un parto distócico que pudiese ocacionar hipoxia o anoxia cerebral y consecuentemente daño cerebral.
Algunos estudios recientes han demostrado que si una rata o un cachorro de perro son hiperestimulados durante los primeros periodos del desarrollo conductual el, cerebro madura más rápidamente y aún puede ser ligeramente mas grande que el promedio, con mas neuronas, más largas y con sinapsis nerviosas mas elaboradas Esto muestra que el medio ambiente puede afectar de manera positiva o negativa en el desarrollo de la estructura cerebral. Haciendo lo opuesto se logra el efecto contrario; el cerebro es más pequeño, las neuronas son más cortas las sinapsis nerviosas son menos numerosas que el promedio normal.
Al nacimiento el cerebro del cachorro sólo están parcialmente desarrollados, los centros en la parte más posterior, el tallo cerebral que regula los latidos cardiacos, la respiración y el equilibrio están bien desarrollados en esta etapa, en cambio la regulación de la temperatura que esta controlada por el cerebro muestra un pobre desarrollo, ya que solo entre las dos o tres semanas, los centros que controlan esta función madura, ósea que el cachorro nace poicoletermio y posteriormente se convierte en omeotermio esto lo consigue utilizando la energía proveniente de la leche de la perra, es por eso que el comportamiento contactual, que es instintivo mantiene a la camada agrupada o junto a la madre para mantener la temperatura corporal. Al nacer se encuentran otras partes del sistema nervioso mucho mas maduras, por ejemplo el nervio facial esta bien desarrollado y esto es importante ya que capacita al cachorro a usar la cabeza como sensor para explorar el mundo a su alrededor; pudiendo evitar superficies frías para moverse hacia superficies mas calientes y suaves, esta capacidad le permite al cachorro estar preparado para encontrara el pezón y alimentarse, así como y hacer contacto con superficies tibias ( y así regular la temperatura corporal por comportamiento, mas que por metabolismo) o arrastrarse alejándose de áreas con temperaturas extremas.
El Dr. Jack Werboff en el laboratorio de Jackson en Bar Hervor Maine, USA. Encontró que los cachorros en sus primeros días de vida pueden discriminar, por sensaciones táctiles diferencias en las texturas. Weboff encontró que un cachorro puede hacer la elección de arrastrarse en una superficie suave diferenciando de una rugosa si al final de la superficie suave encontraba una mamila con leche, y lo opuesto, un cachorro puede condicionarse si al final de la rugosa encuentra alimento, claramente el cachorro durante los primeros días de vida tiene la capacidad de aprender, el echo es que tanto el sentido del tacto, del olfato y el gusto están perfectamente desarrollados en el cachorro.
En otro trabajo realizado por el Dr. Michel Fox, en el cual coloco aceite de anís alrededor del pezón de la madre y comprobó que el cachorro con hambre se arrastra detrás de un hisopo humedecido en este aceite 24 horas después de su experiencia con el pezón, los cachorros que no se expusieron a esta experiencia retiran la nariz cuando el hisopo impregnado de aceite de anís se les aproxima.
Las conexiones del cordón espinal hacia las extremidades están desarrolladas pero es mas relevante este desarrollo en los miembros delanteros que en los traseros, la diferencia es mas notoria cuando el cachorro se arrastra para alimentarse o para buscar una superficie con una temperatura mas agradable, en esta actividad el cachorro utiliza los miembros anteriores y no los posteriores, de echo estos últimos prácticamente los arrastra. Los caminos para los movimientos voluntarios y refinados que se originan en el prosencéfalo se desarrollan mucho mas tarde, entre las tres y cuatro semanas de edad, es cuando podemos observar movimientos mas coordinados de los cuatro miembros.
Cuando se observa que la madre lame a los cachorros y consume la orina y las heces fecales de los cachorros lo hace ante la imposibilidad de los cachorros de poder controlar voluntariamente la micción y defecación y es la madre quien tiene que provocar esos estímulos, si no fuera así los cachorros ensuciarían constantemente el nido o paridero, provocando insalubridad, poniendo en riesgo de procesos infecciosos a los cachorros, así la respuesta es un simple reflejo involuntario es por eso que cuando criamos cachorros huérfanos aconsejamos que posterior a la alimentación asistida frotemos con un algodón húmedo la zona de los genitales. Mas tarde el cachorro madura y puede controlar estas funciones, evacua en un lugar particular y alejado del nido (este instinto es utilizado para entrenar a los cachorros a orinar y defecar en un lugar especifico cuando llegan a casa por primera ves). Se sabe que estas funciones son controladas en los lóbulos frontales estando asociados con funciones como la memoria y el aprendizaje y los cachorros no aprenden hasta que estas áreas se encuentran ya maduras, esto es entre las cinco y seis semanas de edad. Una semana antes de lo anterior otras partes de prosencéfalo madura ( entre la tercera y cuarta semana ) y los primeros signos de madures de la región prosencéfalica están involucradas con el control voluntario de los movimientos y localización de estímulos táctiles del cuerpo como caricias, etc. Un poco mas tarde los centros involucrados con las percepciones auditivas y visuales maduran, alrededor de la cuarta semana de edad una buena parte del cerebro del cachorro ha madurado, pero no es sino hasta la quinta y sexta semana de edad que el Sistema nervioso esta totalmente “integrado”.
Una de las mejores indicaciones que tenemos sobre el desarrollo y los cambios que tienen lugar en el cerebro del perro lo podemos observar en el electroencefalograma (EEG) o en el estudio de la ondas cerebrales, estas son obtenidas de la actividad eléctrica de la corteza cerebral (lamentablemente hasta la fecha ( año 2001) en México no se cuenta con ningún centro que realice este tipo de estudios, ni su interpretación). La actividad eléctrica de la actividad de la corteza cerebral del cachorro al nacer y durante las dos primeras semanas de vida es muy débil y el potencial eléctrico es de amplitud muy baja. Entre la tercera y cuarta semana hay un marcado incremento en la fuerza, la cual finalmente alcanza el nivel de adulto hasta la quinta semana. La formación reticular que mantiene al cerebro en estado de alerta y despierto está probablemente desarrollada desde el nacimiento, esto se debe a que los cachorros que permanecen durante largos periodos de tiempo dormidos, este sueño es de tipo “activado” demostrándolo porque los cachorros permanecen durante este periodo estremeciéndose mientras duermen, la duración de este sueño “activado” permanece durante las primeras tres semanas y, luego, en los animales de mas edad representa un estado profundo de sueño.
El concepto de los periodos sensibles en la vida temprana de los perros basados en las características del comportamiento son ampliamente aceptados en cuatro periodos comúnmente definidos, sin embargo el periodo prenatal que seria en nuestra opinión, y algunos otros autores en realidad el primer periodo. Los periodos sensibles se pueden traslapar unos con otros por lo que no son exactos.
PERIODO PRENATAL:
La etapa prenatal es muy importante ya que el someter a la perra a situaciones estresantes provoca la liberación de catecolaminas y con ello la liberación de glucocorticoides, el caso contrario son las situaciones de confort con la liberación de neurotransmisores como la serotonina durante el periodo de sueño MOR (Movimiento de ojo rápido), por lo anterior pone de manifiesto que si deseamos tener cachorros más adaptables y menos reactivos es conveniente brindar a la perra estímulos ambientales adecuados como es el contacto físico, alimentación adecuada, periodos de sueño, etc.
PERIODO NEONATAL:
Este periodo abarca de los 0 a los 14 días de edad. Los cachorros recién nacidos se encuentran en estado de desarrollo neurologico temprano, las conductas observadas en este periodo son básicamente tróficas (alimentación), contactuales, y periodos de sueño activado prolongado. Se sabe que el 30% de día del cachorro lo pasa alimentándose y la demás parte del tiempo durmiendo. Estos tiempos varían de camada a camada dependiendo del comportamiento de la madre. El dormir en el recién nacido aparentemente no es tan relajado debido a que como se menciono anteriormente se caracteriza por la presencia de tremores musculares y el sueño mas profundo se observa hasta finalizar este periodo o ya comenzado el periodo de transición.
El periodo neonatal representa un tiempo de total dependencia del cachorro con la madre, el cual reiteramos, se caracteriza por una conducta ingestiva en la forma de amamantamiento, sueño activado y reflejos primitivos que son estimulados por el lamido de la madre.
PERIODOD DE TRANSICIÓN:
El periodo de transición, como su nombre lo indica, representa un periodo de cambios rápidos, ya que es el periodo mas corto de todos esto es de los 15 a los 21 días de nacido, donde pasa de una total dependencia de la madre a una cierta independencia debido a una rápida maduración del sistema nervioso. La maduración del resto de los órganos sensitivos (oído, vista) significa que el cachorro será bombardeado por estímulos medio-ambientales. El periodo de transición representa un tiempo de cambios dramáticos para el cachorro, este es ahora capaz de reaccionar a los estímulos, a su madre, sus hermanos de camada, la madre, luz, sonidos, etc. En este momento es cuando el perro comienza a identificar a los congeneres (Impronta cerebral). Al final de este periodo se comienzan a dar las primeras señas de un comportamiento de juego, manifestado con el levantamiento de una pata.
La presentación y primera etapa del periodo de socialización se correlaciona con la mielinización final de la medula espinal, los cochorros son capaces de percibir y reaccionar a su medio ambiente de una manera muy similar a como la haría un perro adulto. La habilidad de percibir y reaccionar a las cosas que habilita al cachorro a aprender de su medio ambiente por medio de experiencias y asociación de las mismas con las respuestas.
Los reflejos de recién nacidos declinan y el cachorro se convierte de un animal dependiente de la madre a un perro extremadamente receptivo de los estímulos medio-ambientales. Este cambio esta asociado a la formación de los patrones de conducta del perro adulto, se desarrolla mas el comportamiento de juego, este juego capacita al cachorro para volverse mas independiente y lo provee de las bases para el desarrollo de relaciones sociales con sus hermanos de camada así como con otras especies como el ser humano, gatos, caballos y las demás especies con las que convivirá. El dormir y alimentarse dejan de dominar el día del cachorro ya que el juego comienza a ser mas importante, preparando al cachorro en las relaciones sociales intrespecie.
Las primeras etapas del periodo de socialización se caracterizan por el entusiasmo del cachorro para aproximarse a estímulos nuevos particularmente en la relación social con otras especies, incluyendo al ser humano, se desarrolla el característico movimiento de la cola. Este periodo ha sido clasificado como un periodo “critico”, es en este periodo cuando las experiencias por pequeñas que sean pueden ser determinantes para el comportamiento del perro adulto.
Ciertos patrones de comportamiento son observados durante este periodo en el desarrollo de las relaciones sociales. De las tres a las cinco semanas de edad el cachorro tiene reacciones positivas de aproximación e investigación de cualquier individuo nuevo, estas respuestas declinan cambiando a reacciones de evasión y miedo, este es un comportamiento instintivo de adaptación y es para que en los inicios del periodo de Sociabilización el cachorro sociabilice con su especie (Sociabilización primaria), evitando el contacto con otras especies que en vida libre podrían tratarse de depredadores o de enemigos.
Muchos estudios sobre los efectos del aislamiento social y sensitivo a estímulos ambientales y sus efectos sobre el comportamiento del perro en su vida posterior. El Dr. Thompson encontró que los cachorros criados en lugares con un medio ambiente pobre en estímulos ambientales entre las cuatro y las siete semanas de edad eran perros hiperquineticos en situaciones nuevas, esto es un incapacidad de adaptación ante situaciones no conocidas, son perros con menor capacidad para resolver laberintos simples, dándose aproximaciones inapropiadas ante situaciones que son potencialmente peligrosas para los perros, en este mismo trabajo el Dr. Thompson trabajo con perros control los cuales resolvieron adecuadamente los laberintos y se adaptaron mejor ante cambios medio ambientales. Se encontró que los perros con privación de estímulos eran incapaces de responder de manera adecuada a estímulos de dolor, en este estudio se concluyó que perros criados en aislamiento entre las cuatro y las dieciséis semanas de edad desarrollan un “Síndrome de aislamiento”, al encontrase privados de estímulos con fines prácticos al conjunto de signos clínicos lo denominamos “Síndrome de Privación” que en realidad seria un sinónimo al “Síndrome de aislamiento”. Los Drs. Patrick Pageat y Claude Beata en un trabajo posterior describieron este tipo de aislamiento denominándolo como “Síndrome de Hiper-sensibilidad, Hiper-actividad” y lo describieron como perros en los cuales la actividad motora se presenta inmediatamente como hipertrofiada. No se quedan en un solo lugar, corren, saltan, juegan sin cesar. Las actividades se caracterizan por la ausencia mas o menos total de estructura, no se encuentra organización secuencial, y en lo particular la fase de apaciguamiento que normalmente debería desaparecer, esto es son incapaces de interrumpir secuencias, son los perros que pueden jugar durante horas enteras mas allá de sus capacidades físicas, presentan inhibida la “mordida inhibida”, normalmente este comportamiento lo presentan perros con un desarrollo normal de comportamiento, los periodos de sueño se encuentran alterados, estos, los perros que presentan el “síndrome de privación” duermen menos que los perros normales, esto es un promedio de 7.5 hr. Por 24, lo que corresponde a un déficit de entre el 30 y el 50%, esto publicado por distintos autores. En la clínica cuando observamos a los perros que responden exageradamente ante cualquier estimulo y presentan exploración oral muy desarrollada muy probablemente se trata de este tipo de pacientes. Es un hecho que muchos de estos perros fueron criados en criaderos comerciales en donde los estímulos ambientales no son y por mucho similares a aquellos a los que el perro se enfrentara en su vida adulta. Así estos perros no debe sorprendernos que cuando asisten a clases de obediencia o simplemente la educación casera para enseñarles a orinar y defecar en lugares específicos se vea disminuido comparándolos con otros perros normales.
El comportamiento más importante involucrado en el desarrollo de las relaciones sociales es el juego , el cual se desarrolla rápidamente durante este periodo. Mientras la actividad de juego evoluciona se va tornando mas elaborada y exagerada, esto también se estereotipa y ritualiza. Las características de los gestos para solicitar jugar pueden ser reconocidas en las interacciones entre cachorros y entre los cachorros y la madre. Este juego es muy importante en proceso de socialización de los animales unos con otros, proveyendo contacto corporal y aprendizaje además de reconocimiento individual. Experiencias de dominante-subordinado durante el juego dan como resultado la formación de una jerarquía social dentro del grupo, siendo una parte esencial en armonía de la camada, así como con la madre y otros adultos si es que estos ultimo conviven con los cachorros, este juego tiene como resultado un desarrollo y aprendizaje aceptable, aprenden los gestos y uno muy importante es la inhibición de la agresividad o la agresividad misma, este comportamiento garantiza la vida del cachorro al enfrentarse a animales eminentemente dominantes con los que se pudiese topar, ya sea de cachorro o como adulto.
La interacción con la madre no solo es importante para la supervivencia del cachorro, sino también ofrece las bases del comportamiento social del perro. Mientras que las respuestas sociales básicas son innatas, el contacto con los hermanos de camada refina y desarrolla estas respuestas básicas, sin embargo los cachorros que únicamente se crían con los hermanos de camada y la madre sin tener contacto con seres humanos este desarrollara un fuerte apego hacia sus congeneres mostrando un comportamiento de evasión hacia las personas, esto mismo sucede con los perros que son adoptados al rededor de las tres semanas, en donde todo el periodo de Sociabilización lo pasaron con humanos, estos, los perros mostraran ese apego hacia las personas mostrando conductas evasivas hacia los perros pudiendo ser incapaz de resolver un conflicto social entre perros, en este caso optara por huir o agredir. Se recomienda que el cachorro sea destetado entre las 6 y las 8 semanas de edad, de esta manera el perro tendrá una adecuada Sociabilización adecuada primero con sus hermanos de camada y posteriormente con su nueva “jauría humana”.
La Sociabilización debe incluir una introducción con niños pequeños así como con adultos ya que el perro no identificara a los niños como parte de su grupos social si estos no fueron parte de su grupo social durante este periodo sensible, puesto que el sentido de la vista tiene un papel fundamental en el proceso total de Sociabilización y no se encuentra totalmente desarrollado sino hasta las 12 semanas de edad, las formas de los humanos se aprenden, ósea que la forma física de un niño es distinta a la de un adulto. Cuando los perros son adultos pueden reaccionar agresivamente hacia formas a las cuales no se expusieron en el periodo de Sociabilización, esto incluye algunos aspectos físicos como personas uniformadas, que usan sombrero, o ropa en general a la que no están acostumbrados, los perros criados en instalaciones militares aceptan muy bien como parte de su grupo social a personas con uniformes, no así a los civiles, esto sucede exactamente igual, de igual menea el reconocimiento de diferentes grupos sociales e incluso razas humanas es percibida por los perros, hábitos alimenticios, higiénicos. etc. Un ejemplo claro es en EUA, un país en donde las razas humanas se encuentran bien definidas, los perros que crecieron en barrios de negros no aceptan como miembros de su grupo social a los caucásicos y viceversa. El periodo pico de acercamiento se presenta entre la quinta y la séptima semana de vida del cachorro, durante este periodo el cachorro es cuando se aproxima de manera activa a otros seres a los que se expone, sin importar las experiencias emocionales estas dos semanas son en las que mejor sociabiliza el cachorro ya que es el quien busca los contactos, aun experiencias como el zarpazo de un gato residente en la misa casa no afecta la socialización del cachorro. Si se espera a que de una manera posterior con otras especies que no sea la suya deberá ser antes de las doce semanas, reiterando que el mejor momento es entre las cinco y siete semanas de edad.
Presencia de la madre: Se ha demostrado que los cachorros que permanecen con la madre hasta las 10 semanas de edad, desarrollan habilidades motoras, mostrando menores problemas de comportamiento en el aislamiento, que los cachorros que fueron separados a las 6 semanas de edad. Esto nos indica que la presencia de la madre es necesaria para el desarrollo normal que llamamos comportamiento hacía elementos vivos o no del medio ambiente, sin embargo debemos de tomar en cuenta que la separación del objeto de apego en este caso la camada o la madre es un evento que puede ser traumático para el cachorro, para disminuir el estrés del cachorro aconsejamos que este sea separado durante la mañana para que el cachorro pueda tener mas horas de luz para explorara el nuevo entorno, se puede ofrecer al nuevo propietario un trapo el cual deberá estar varios días antes para que con el adsorba el olor de la camada, si recordamos que el olfato es el sentido mas desarrollado del cachorro este olor lo mantendrá vinculado al objeto de apego mientras se adapta al nuevo hogar. Un reloj despertador de cuerda en donde los sonidos rítmicos semejaran los sonidos rítmicos del corazón de la madre cuando este se encontraba in-útero, un muñeco de peluche o una botella de refresco de plástico con agua caliente envuelta en un trapo será similar a los hermanos de camada por lo que el comportamiento contactual disminuirá, la alimentación del cachorro ofreciendo desde las cuatro semanas alimento balanceado, humedecido con agua adaptara al cachorro al régimen alimenticio que recibirá cuando este en su nuevo ambiente, estos consejos provocaran un menor estrés en el cachorro siendo un perro mas adaptable en su vida adulta.
El periodo juvenil se extiende aproximadamente desde la semana 10 hasta la madurez sexual, esto dependerá de la raza, ya que esta se presenta de manera variable existen en las razas de talla pequeña una madurez sexual mas rápida, alrededor de los seis meses y en las razas molosas pude ser hasta los 14 meses de edad, durante este periodo los patrones básicos no cambian pero se pueden dar mejoras graduales en las habilidades motoras con un incremento de la fuerza y la práctica. Los cachorros aprenden la importancia del medio ambiente y exhiben conductas apropiadas y adaptables a diferentes situaciones ambientales que se presenten. Se incrementa la exploración y se efectúan las primeras excursiones largas. A los cuatro meses de edad el cachorro aun es torpe, sin embargo a los seis meses el cachorro a adquirido prácticamente las capacidades motoras de un adulto, es en este periodo cuando las capacidades de aprendizaje se desarrollan totalmente, de hecho es en este momento cuando en muchos cachorros se esta realizando el programa profiláctico de vacunación, muchos colegas recomiendan el aislamiento hasta que se aplique la ultima vacuna, este aislamiento impide que se desarrollen normalmente las capacidades de aprendizaje, se recomienda que los cachorros contienen teniendo contacto con otros perros y personas, existen programas de estimulación temprana en perros en donde se reúnen cachorros con características similares, clínicamente sanos, en donde los propietarios manipulan a todos los cachorros, menos al propio y se practican sesiones de juego controlado en donde los perros aprenden que existen limites.
En resumen, el desarrollo del comportamiento se puede dividir en cuatro periodos básicos y la etapa prenatal, estos periodos se basan en los cambios mayores de comportamiento social los cuales reflejan un desarrollo neurológico y mejoramiento de las habilidades físicas.
La evidencia de la influencia de los genes sobre el comportamiento canino se deriva de dos fuentes principales: Del análisis de las diferencias de razas y de los programas selectivos de cruzas. Es obvio para cualquiera que esté familiarizado con distintas razas de perros, que estos, los perros muestran un relativo patrón común o diferencias especificas de comportamiento tanto por raza como por línea genética, estas características están determinadas por los genes y se demuestra por la aparente heredabilidad de los problemas de comportamiento en ciertas razas, por ejemplo, el Cocker Spaniel ingles que exhibe un “síndrome de furia” o “bajo umbral de agresión” caracterizado por un repentino e impredecible estallido de agresión, tal síndrome se ha descrito en los colores rojo o negro, en líneas especificas en donde los ancestros presentaban el mismo patrón de comportamiento, esto sugiere una base genética. La agresión de bajo umbral también puede ser un problema en razas que han sido seleccionadas por sus tendencias agresivas, tal es el caso del Pastor Alemán, Doberman y Bull Terrier.
Otros patrones de comportamiento que involucran un componente De hecho algunas razas de perros se seleccionan por su tendencia a perseguir o acechar a su presa y por ultimo capturarla y matarla. Se destacan entre esas razas los terriers, Dachshunds y varias razas de perros de caza, no es de extrañarse que perros de compañía ocasionalmente presenten esa tendencia ancestral genéticamente transmitida e heredable incluyen temor a los sonidos fuertes en ciertas líneas de la raza Collie.
En los trabajos pioneros de la genética del comportamiento en perros, el Dr. Fuller y el Dr. Scott en 1965 condujeron un estudio de las bases genéticas de las diferencias de comportamiento en cinco razas: Basenji, Cocker Spaniel, Beagle, Pastor de Shetland y Fox Terrier pelo de alambre. Cachorros de estas razas fueron criados en idénticas condiciones, posteriormente fueron examinados en diferentes edades, sometiéndolos a todos a diferentes pruebas. Los factores que se evaluaron fueron los siguientes: Diferente reactividad emocional, respuesta al manejo o restricción con la correa, entrenabilidad, habilidad para resolver problemas simples como laberintos, tendencia a las vocalizaciones (ladrar y aullar). El análisis de la varianza por individuos, camada y raza indicaron un fuerte significado estadístico de la raza en la expresión de muchos de los experimentos. En algunos casos la relación entre genes y comportamiento prueba ser muy simple, por ejemplo en la examen “manso”- los cachorros respondían a la aproximación y manejo por un extraño, encontró, en palabras de los autores, una razonable consistencia con la acción de un gene único dominante de actitud silvestre (salvaje) en el Basenji y su correspondiente recesivo “gene de mansedumbre” en el Cocker Spaniel. Otros fueron más complejos, por ejemplo, la tendencia la tendencia a responder con agresión de “juego”, parece estar bajo la influencia de dos pares diferentes de alelos los cuales producen sus efectos aumentando o disminuyendo la respuesta del animal al umbral de estimulo de jugar. Algunas características muy complejas para prestarse a un análisis genético. Los factores de temperamento y de motivación ejercieron una fuerte influencia sobre las habilidades de los cachorros para resolver problemas, los individuos que resolvieron satisfactoriamente unos problemas no fueron tan aptos para resolver otros (The influence of Ineritance and envioment on canine behavior: Mit. And fact.,j. Of Small Animal. Pract. 28, 949-956, y 1987).
Si bien Scott y Fuller usaron el termino “la población genetizante” cuando hablan de genes para manso y salvaje, ellos no sugieren que el atributo comportamiento por si mismo estuviera codificado en el genotipo. Si hipotéticamente existiera una correspondencia simple uno a uno entre genes comportamiento, entonces podría ser posible seleccionar perros para que dieran mansos, es decir, sin influenciar otro aspecto del fenotipo, en la practica esto es imposible debido a que el llamado “gene para la mansedumbre” debe en realidad ejercer una influencia más directa sobre el SNC y la fisiología de esos animales y el ser manso es solo uno de los muchas manifestaciones de su efectos. Los factores genéticos ciertamente dotan individualmente a los perros con diferentes capacidades y predisposiciones para comportarse de forma particular, pero la cantidad en que esas capacidades o tendencias se muestran depende en gran medida de la clase de experiencias que tenga cada individuo así como el tipo de relación que se establezca con el propietario, esto es como mencionamos anteriormente, el comportamiento de cualquier individuo estará definido por factores genéticos e influencias medioambientales durante la ortogenia de la conducta, ¿en que porcentaje?, es una pregunta difícil de contestar, ya que esto dependerá de cada individuo.
La agresividad es una característica de alta heredabilidad (curiosamente este hecho no se demostró primero en los perros sino en ratones de laboratorio). Por ende el incremento de la agresividad por selección se puede hacer fácilmente, tanto que esta agresividad incrementada puede ser difícil de controlar en algunas razas. Además los perros con alto grado de agresividad cuentan con propietarios que no tienen la capacidad para controlarlos. En manos inexpertas o inadecuadas, tales perros pueden ser muy peligrosos, sin embargo los criadores de perros que incrementan la agresividad de los perros deben tomar en cuenta la comercialización de estos perros, advertir a los propietarios de la carga genética que poseen para que sepan en realidad lo que están adquiriendo, existen familias que pretenden adquirir a un perro como mascota, como un miembro mas de la familia, si el perro genéticamente fue seleccionado como perro de guardia, será un perro eminentemente dominante, territorial y agonista, este pretenderá ser el alfa de la “jauría humana” y puede ser muy peligroso para inexpertos o para los niños de la casa. La forma de agresión está determinada genéticamente en el perro (salvo algunos tipos de agresión por miedo que son de origen ontogénico), sin embargo existen grandes diferencias cuantitativas en el grado de agresividad entre razas y dentro de estas. En el transcurso de la domesticación, el hombre ha modificado el patrón de agresividad en cuanto a intensidad y manera de expresarla, pero no su naturaleza básica Una agresividad es deseable aún necesaria, esta es la razón por la que muchos propietarios buscan un perro, para proteger su casa, coche o a su familia, sin embargo se les tiene que orientar correctamente de cual es su mejor opción.
Probablemente la estadística más difícil de reportar son aquellas relacionadas con la raza que presentan predisposición a agredir con mayor tendencia, debemos de tomar en cuenta que algunos de los patrones de agresividad son de origen ontogénico, ósea de la experiencias que el perro haya vivido durante el desarrollo conductual, también estas estadísticas deben ser tomadas con cautela debido ya que determinar que cuantos perros de cada raza existen en un área geográfica determinada es muy difícil, además en los reportes de agresión de un perro de pelo corto puede ser confundido por la persona agredida por un Pit Bull Terrier, de igual manera las tendencias cambian de una ciudad a otra, estas tenencias también son por moda y probablemente la raza que hoy no es considerada agresiva potencialmente el día de mañana si lo sea . Las estadísticas realizadas por le Dr. Wright y el Dr. Nesseriorte encontrón lo siguiente; Los perros implicados mas frecuentemente en mordidas hacia la gente son los perros criollos (mezcla de razas). En tres de cinco estudios en los cuales se identificaron las razas el estudio arrojo el siguiente dato; de 41 % a 47.7 % fueron perros criollos. La otra cantidad de perros que no se identificaron se distribuyeron en perros de raza pura no se especiaron cuales. En otros estudios los perros criollos igualmente fueron los responsables de la mayoría de los casos de agresión, alrededor de 63 %, este estudio tubo un periodo de observación de cuatro años. Después de los perros criollos se identificaron a los perros de la raza Pastor Alemán, con un rango que varia del 17.2 % al 36. 7 %, seguido por los Poodles con rangos que varia del 4.4 % al 8.6 % y los Collies con un 6.2 %. La identificación de la raza, reiteramos puede ser confundida por los observadores, ya que al momento de los hechos las personas se encuentran muy estresadas.
Otro estudio informa que las razas que más agredieron fueron Pit Bull Terrier con el 51. 4 % de 143 casos reportados en el año de 1987 en EUA. En Australia se realizo otro estudio en 1988 y el Pit Bull Terrier presento el 14.3 % de 42 casos reportados, el Stafordshire Bull Terrier ocupo el 31.0 % de 16 casos reportados en un estudio también en Australia durante 1987. En un estudio en el año de 1988 en EUA de 11 casos reportados el 18.2 % fueron perros de la raza San Bernardo, como se observa en este estudio una raza que por excelencia ha sido un perro eminentemente de rescate en este estudio presenta comportamiento agresivo, de hecho en la practica clínica cada día se presentan perros de esta raza con problemas de agresión, en 1988, también en EUA de 287 casos de agresión 4.7% de los casos fueron de la raza cobrador de labrador, en otro estudio en el mismo año en Australia de 42 casos de agresión 9.1 % fueron perros de la raza Cocker, sin especificar si eran Americano o Ingles.
En un estudio realizado por Szpakowski sobre la epidemiología de la agresión en la ciudad de Guelph, determino que la raza que predomino en problemas de agresión fueron en orden de mayor a menor incidencia los siguientes; American Staford Bull Terrier, San Bernardo, Fox Terrier, Rottweiler, Jack Rusell Terrier, Pulí, Viejo pastor Ingles, Dálmata, es de notar que en México, como en Latinoamérica, algunas de estas razas no presentan la incidencia que en Guelph, simplemente por su baja popularidad.
Entre más se conozca con respecto a los atributos de comportamiento especifico, ya sean favorables o desfavorables para el fin zootécnico al que se dedicara el ejemplar de cada raza e incluso de cada línea genética tendremos una mayor seguridad para recomendar perros de pastoreo, guardia, detectores o simplemente como perro de compañía para las familias. En su inmensa mayoría nuestros clientes requiere de perros que vivan en ambientes diferentes que van desde pequeños departamentos hasta casas con grandes espacios abiertos, pudiendo variar de una sola persona, hasta familias numerosas, con niños o sin niños, deportistas o sedentarios, etc, existe en la literatura popular algunos perfiles sin fundamento científico, de lo que debería ser el patrón de comportamiento en una raza especifica, en estos perfiles se describe su capacidad de entrenamiento, nivel de actividad, agresividad, comportamiento con los niños, etc. Sin embargo las perspectivas de los criadores, federaciones y asociaciones, reflejan únicamente las inclinaciones personales, posiblemente sus propias experiencias y por supuesto los aspectos financieros.
Los Drs. Hart realizaron un estudio de opinión sobre las 56 razas mas populares en EUA en el cual se entrevistaron a médicos veterinarios dedicados a las pequeñas especies, entrenadores, el estudio contemplo estados del Este, Oeste y centro. Consideraron 13 tipos de comportamiento de interés primario para orientar a los futuros propietarios de perros de compañía. Las características de comportamiento fueron expresadas específicamente en cuestionarios que pedía a los informantes una evaluación de los perros con atención a características especificas en el comportamiento, también en este estudio se evaluaron características por dimorfismo sexual, perros machos (Pm), perros.