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Conducta Beneficios que aportan a la salud, las relaciones afiliativas entre el humano y el perro

Beneficios que aportan a la salud, las relaciones afiliativas entre el humano y el perro

1) Introducción

La relación humano-perro es un ejemplo de relación entre especies (Odendaal 2000). En este escrito se menciona el origen de las interacciones humano-animal, sus características y cómo dichas interacciones afectan el bienestar físico, psicológico y social del ser humano.

La relación entre un humano y un perro depende de factores externos como el ambiente en el que se desarrolla el vínculo que hay entre ambas especies, los factores internos, como mecanismos hormonales, que regulan el comportamiento y las experiencias previas en ambas especies. Todo esto en conjunto puede desarrollar una relación profunda y beneficiosa para los dos individuos. El lugar que ocupa el perro en nuestras vidas actualmente es equiparable a la adición de un nuevo miembro de la familia. Por lo que la etología clínica veterinaria ha tomado un mayor interés debido a la importancia crecientehacia los animales de compañía, su bienestar y la prevención o resolución de problema conductuales que pueden dañar el vínculo humano-animal.

Los perros enriquecen nuestra vida y la prevención de los problemas de conducta es sin lugar a duda la mejor “vacunación” que podemos ofrecer para favorecer el lazo entre ambas especies. Debido a esto, la atención temprana a los problemas comportamentales en sus primeras manifestaciones son en gran medida fundamentales para la resolución exitosa de un problema ya existente. Debido a que la convivencia que existe en la actualidad con los perros la conducta juega un rol importantísimo en el relación entre elpropietario y su mascota, la cual determinará indiscutiblemente si permanecerá durante toda su vida con el mismo propietario o no, debido a que un mal comportamiento puede favorecer su abandono o eutanasia dando paso a la disolución del vínculo propietariomascota.

2) Importancia de la prevención de los problemas de conducta.

La convivencia entre ambas especies puede verse afectada por problemas comportamentales de los animales que se definen como patrones de conducta que resultan peligrosos o molestos para el humano, constituyendo una disfunción en la comunicación entre ambas especies y comprometiendo el bienestar mutuo (Mugford, 2007).

Algunas de estas conductas son las habituales de la especie, pero se presentan en forma exagerada, repetitiva o ritualizada, como por ejemplo el miedo extremo o la agresión (McFarland, 1981). Las consecuencias extremas de estos trastornos incluyen el abandono de los perros, su alojamiento permanente en refugios caninos o, en el peor de los casos, la eutanasia (Diesel, Pfeiffer & brodbelt, 2008; Salman, Hutchison & Ruch- gallie, 2000; Salman, New, Scarlett, Kass, Hetts & Ruch-gallie, 1998).

La coexistencia entre los perros domésticos (Canis familiaris) y los humanos puede verse afectada por la presencia de problemas de conducta. Éstos, principalmente, se relacionan con agresión, miedo y ansiedad, en menor medida, los desórdenes compulsivos. Las alteraciones relacionadas con la agresión son las más preocupantes a nivel social, dado el riesgo que conllevan para el humano.

Con el objetivo de mejorar la relación entre ambas especies, los problemas de comportamiento de los perros deben ser tratados por lo que se sugiere llevar a cabo diferentes tipos de intervenciones (Wells & Hepper, 2000). Los abordajes conductuales incluyen técnicas de modificación de conducta que involucran procedimientos basados en el condicionamiento clásico e instrumental, tales como la desensibilización sistemática, el contracondicionamiento y el reforzamiento diferencial de otras conductas (Domjan, 1998). En algunos casos también se emplean tratamientos farmacológicos en combinación con los tratamientos de conducta (Sherman & Mills, 2008; tancer, Stein, bessette & Uhde, 1990).

El comportamiento inaceptable en perros y gatos, es la causa mas común de abandono y eutanasia en todas partes del mundo. Estadísticas Norteamericanas sugieren que más perros son eutanasiados por problemas comportamentales que por problemas con causa orgánica. Es por esto que la prevención de dichos problemas comienza con la asesoría previa a la adquisición de un perro para las personas o familias que desean obtener una mascota, seguida de educación continua y personalizada de un Especialista que instruya a las personas que convivirán con el perro, sobre la conducta normal de los perros y cómo prevenir futuros problemas conductuales; incluyendo sesiones de entrenamiento impartidas por personas calificadas y actualizadas que basen sus técnicas en un ganar ganar y no en el castigo.

Es muy importante recordar que el castigo se encuentra sobreusado, es decir que es relativamente inefectivo y NO es necesario para un entrenamiento satisfactorio. Debe hablarse con los propietarios porque generalmente se utiliza de una forma inapropiada. Los propietarios necesitan saber que el castigo físico, un duro reproche o poner el hocico del animal en la orina o en las heces son métodos inaceptables y no efectivos que indiscutiblemente afectan el lazo mascota-propietario.

Es importante mencionar que el 40% de los perros y gatos tiene algún problema de conducta y solo el 15% asiste con especialista de conducta.

Problemas más frecuentes

1. Molestia para el propietario
2. Peligro para el animal
3. Comprometa la salud pública

1. Las conductas molestas para el propietario frecuentemente incluyen:

• Agresividad: ofensiva, defensiva, depredadora.
• Conducta destructiva
• Eliminación inadecuada
• Ansiedad por separación
• Vocalización excesiva
• Miedos y fobias (cuetes, tormentas, aparatos electrodomésticos)
• Trastornos compulsivo: (persecución de cola, dar vueltas en círculo, automutilación,
cazar moscas)
• Síndrome de disfunción cognitiva
• Pica
• Otros (cavar hoyos, hiperactividad, desobediencia en gral)

2. Peligro para el animal:

• Anorexia en el gato causa lipidosis hepática.
• En el perro dermatitis psicógena (acral).

3. Salud Pública

• Problemas de agresión, alergias, zoonosis. Estos problemas, como se mencionó anteriormente, comprometen indudablemente el vínculo humano-mascota llegando a ser desafortunadamente causa de eutanasia. En la mayoría de las ocasiones se pueden prevenir estas conductas con un adecuado manejo. Por lo que es importante saber un poco del origen del perro y las conductas normales de esta especie.

3) Domesticación

La domesticación es el proceso mediante el cual una población de animales se adapta al ser humano y al cautiverio mediante una combinación de cambios genéticos que se producen por determinados eventos del desarrollo inducidos por factores ambientales que ocurren de nuevo en cada generación (Price 1984).(1)

Origen Las relaciones humanas con los animales de compañía comienzan con la evidencia de un fósil de medio millón de años que indica una asociación entre el Homo erectus y alguna especie canina (Messent y Serpell, 1981). Incluso antes de que los seres humanos se establecieran en las comunidades agrícolas, se mantuvieron los animales salvajes y domésticos como compañeros (Savishinsky, 1983).(2)

El origen del perro (Canis lupus familiaris) ha sido objeto de hipótesis variadas. Darwin (1871 The descendant of man and selection in relation to sex. Murray, London) pensaba que el perro provenía de varias especies de cánidos salvajes. Lorenz mantuvo una opinión similar por algún tiempo sosteniendo que alguna razas de perros proceden del lobo (Canis lupus) y otras del chacal dorado (Canis aureus). Posteriormente Konrad Lorenz modificó su opinión y defendió que el perro procede únicamente del lobo. Actualmente la mayoría de los especialistas coinciden en que todas las razas de perro proceden del lobo. Esta hipótesis está basada en la gran similitud que existe entre ambas especies debido a que el DNA mitocondrial es similar en un 99.8% a diferencia del coyote (Canis latrans) que solo es similar en un 96% o del chacal que varía entre el 88% y el 96%. El perro y el lobo son también muy parecidos en su comportamiento, y ambas especies comparten la mayoría de sus pautas de conducta.

Los restos del perro más antiguo encontrados datan de unos 14,000 años. Estos restos (mandíbula) fueron encontrados en una tumba paleolítica en Oberkassel, Alemania. Existen otros dos artículos en los que en uno concluye que la domesticación ocurrió hace 15,000años y otro en el que se suponía una antigüedad mayor a 30,000años. El lugar en donde ocurrió la domesticación no se conoce con certeza, pero la hipótesis más aceptada es que ocurrió en Asia Oriental.

¿Cómo ocurrió? Dos hipótesis:

1) El perro fue domesticado directamente a partir de los lobos salvajes. Aunque todos los intentos que se han llevado a cabo por domesticar lobos salvajes han fracasado.

2) La domesticación tuvo lugar en dos etapas. Los lobos comenzaron a alimentarse de los desperdicios y restos que encontraban cerca de los asentamientos humanos. Por lo que estos lobos comenzaron a aislarse de la población original. Fueron favorecidos con la selección natural debido a que los individuos de menor tamaño y poco temerosos de los humanos tenían mayor probabilidad de sobrevivir y reproducirse que los animales muy grandes que necesitaban más alimento o eran muy temerosos. En la segunda etapa, este animal intermedio entre lobo y perro (Protoperro) con la intervención del hombre ahora sí pudo haberse convertido en un animal doméstico.

Evidencias:

1) Genéticas: La secuencia de ADN mitocondrial del perro se diferencia un 0.2% de la del lobo. Wayne R (1993)
2) Comportamentales: Simulación realizada con los zorros plateados (vulpes vulpes) 100 hembras + 30 machos. Selección genética durante 40 generaciones Criterio de selección, +docilidad = población de zorros dóciles

Cambios de conducta en la domesticación

Los lobos forman grupos estables, cooperan en la casa y en la defensa del territorio y/o recursos y cazan presas grandes.

1) Neotenia
Perro adulto tiene un comportamiento similar a un lobo de 4-6 meses, hay un aumento de la dependencia hacia los propietarios, escasa agresividad, instinto depredador poco desarrollado y existe una mayor inclinación hacia el juego.

2) Conducta social
Ambos establecen jerarquías, en el perro es menos marcada (4º mes) en el lobo (4ª - 5ª semanas). El perro es menos territorial y menos agresivo que el lobo.

3) Conducta de alimentación
El perro disminuye la neofobia, acepta más alimentos nuevos a comparación del lobo. El instinto depredador es mayor en el lobo, el perro lo muestra solo en determinadas circunstancias.

4) Aumento de la frecuencia de algunas conductas
En general los lobos ladran muy poco (excepción del Canis lupus pallipes), el perro ladra más y difiere entre razas. El perro marca más con orina que el lobo.

5) Conducta sexual
El perro alcanza la madurez antes que el lobo. La perra tiene el primer estro de lo 6-9meses, lo machos tardan más en madurar. Las razas más pequeños de perros son más precoces. El lobo es estacional y alcanza la madurez sexual al final del 2º año de vida. La hembra tiene un solo estro al año. La perra tiene estro dos veces al año aprox.
El lobo y los canidos salvajes tienden más a ser monógamos a diferencia de perro que es más promiscuo.

4) Periodos de desarrollo del perro

  • Prenatal -63 a 0 días
    Las experiencias estresantes durante el embarazo pueden producir descendientes más reactivos en el futuro (Serpell y Jagoe, 1995) y ser teratógenos –agentes que producen malformaciones congénitas- y pueden tener potencialmente mayores efectos así como los daños menores tempranos, pueden relativamente, ser magnificados tan pronto el sistema nervioso crece y se desarrolla.
    Las hembras acariciadas durante el embarazo producen camadas más dóciles y tolerantes al contacto comparadas con aquellas hembras a las que no se les ha proporcionado esta atención afectuosa (Dehasse, 1994).

  • Neonatal: 0 a 12/14 días
    El cachorro nace ciego y sordo y depende completamente de la madre para todas sus necesidades.
    No son capaces de regular su temperatura corporal.
    Esta bien desarrollada la habilidad de reaccionar al dolor cutáneo y los movimientos vestibulares de la cabeza.
    El movimiento que presentan cuando se arrastran se orienta de frío a calor.
    El cachorro dedica prácticamente todo su tiempo a dormir y mamar. La conducta de alimentación ocupa cerca del 30% del tiempo. El sueño del cachorro es solo de tipo REM, y se caracteriza por temblores y movimientos musculares fuertes. La defecación y micción son actividades reflejas que resultan de la estimulación táctil de la zona perineal del cachorro por parte de la madre. Son capaces de aprender asociaciones simples, pero solo son sus limitadas capacidades sensoriales y de comportamiento. El tiempo de respuesta es muy lento, haciendo imposible las asociaciones precisas entre estímulos y respuesta.

  • Transición: 12/14 a los 21 días
    El cachorro comienza a explorar el entorno y muestra conducta de juego por primera vez. La conducta de eliminación ya no depende necesariamente de la estimulación táctil. Existe la presencia de sueño de REM y de sueño de onda lenta.
    El cachorro es capaz de responder a estímulos medioambientales, como luz y ruido, ya sea orientándose hacia ellos, o retirándose, dependiendo de la intensidad del estímulo. Al final de este periodo el cachorro empieza a lamer comida blanda de un plato. Orinar y defecar se convierten en actos voluntarios. Los juegos empiezan a ser cada vez más comunes y empieza a establecerse la importancia del contacto social como motivador de comportamiento.

    *Periodo sensible del desarrollo: Ocurre cuando el animal es especialmente sensible a un determinado ambiente que ejerce un efecto intenso y duradero sobre el comportamiento.*

  • Socialización: 3ª las 12ª semana
    Tienen un pico de sensibilidad de las 6 a las 8 semanas (Scott y Fuller 1965)
    El principio del periodo de socialización es un rápido desarrollo del cerebro y coincide con a madurez y mielinización de la médula espinal. El cachorro empieza a ser de todo consciente y capaz de responder a su entorno.
    Puede realizar una gran variedad de expresiones faciales (mayormente orejas y labios) y practican una amplia selección de vocalizaciones. Desarrollan la habilidad para formar relaciones sociales primarias con congéneres y otros animales (incluyendo hombres).
    Después de las 5 semanas de edad los cachorros se vuelven más cautelosos con los individuos y situaciones extrañas. Después de las 8 semanas los cachorros son sensibles a inquietudes psicológicas o a estímulos físicos. Muestran preferencias por el substrato para orinar y defecar normalmente distanciados de las áreas de comida y de su cama.

    Desde las 12 semanas de edad los cachorros se asustan fácilmente. Por lo que la falta de emoción “por el riesgo” y su expresión comportamental de evitación, compromete severamente la oportunidad de los cachorros mayores, a habituarse o formar asociaciones agradables con nuevos estímulos resultando en una falta de habilidad para socializar.

  • Juvenil: 12ª semana - a la madurez sexual:
    Hay mayor tendencia a explorar el entorno.
    Durante este periodo no se producen cambios importantes de conducta, las pautas de comportamiento iniciadas durante el periodo de socialización continúan, y el perro desarrolla progresivamente su capacidad motora.
    Se establecen relaciones de dominancia duraderas, este periodo es importante para la prevención de agresividad por competencia.
    Los fundamentos de los futuros aprendizajes están establecidos y su finalización la limitan espacios cortos de atención y excitabilidad emocional.
    Demasiado reclamo de atención de los cachorros es rechazado por parte de la madre, quien o ignora o da una corta, severa, agresiva respuesta si un cachorro reclama demasiado.
    Por lo que el cachorro aprende a utilizar la comunicación corporal y señales de calma, ya que cuando el cachorro cede en el reclamo la madre inmediatamente cede de igual forma.

5) Conducta social del perro

Epigénesis

El comportamiento y la naturaleza del individuo, igual que otras características fenotípicas, son consecuencia de la interacción del ambiente y del genotipo individual. El genotipo se fija en la concepción, pero el ambiente cambiante, tanto si ocurre de forma natural como por la manipulación deliberada, afectará tanto al genotipo, como a la experiencia previa, para alterar el fenotipo (Mills, 1997).

Características

  • Comportamiento social
    Engloba todas las características que dirigen los perros hacia miembros de su propia especie. Esta sociedad esta formada por un grupo de individuos organizados de forma cooperativa, más allá de la época de apareamiento o migración.

  • Ventajas de la vida en grupo
    • 1) Evitar depredación: Defensa, vigilancia y efecto de confusión disolución.
    • 2) Conseguir alimento: Cooperativamente
    • 3) Reproducirse y cuidar de las crías: Pseudolactación canina
      Es una conducta normal desde un punto de vista fisiológico que aparece al disminuir la progesterona y aumentar la prolactina

      Pseudolactación: Síntomas físicos + síntomas conductuales
      Tratamiento: resolución espontánea + antiprolactínicos
      Prevención: esterilización

  • Otros aspectos importantes
    • 1)Comunicación:
      Reconocimiento individual: Los animales domésticos son capaces de reconocer individualmente a otros animales de su especie.
      Estímulos visuales, auditivos y olfativos.
      El comportamiento social se basa en el intercambio de información mediante posturas corporales, vocalizaciones y olores.
    • 2) Territorialidad:
      Defensa activa de una zona La entrada de un individuo puede ser aceptada en forma selectiva.
    • 3) Relaciones afiliativas
      Conjunto de interacciones positivas que sirven para mantener la cohesión del grupo.
      Acicalamiento social, juego, mantener la proximidad. Es dirigido no solo a su propia superficie, si no también a otros individuos. En zonas de difícil acceso. Los individuos de alto rango tienden a recibir más acicalamiento que es muy frecuente en individuos emparentados. Lo que contribuía a reducir las interacciones agresivas y establece relaciones de cooperación

6) Conductas afiliativas

Las relaciones sociales pueden clasificarse como afiliativas o agonísticas. Esto se define por el tipo de interacción a través de mensajes que se transmiten mediante señales no verbales como el contacto visual, la postura corporal y la distancia entre los individuos. Durante las interacciones de tipo afiliativas, el contacto visual comunica apertura y disponibilidad hacia el otro. Se presentan con mayor frecuencia que las agresivas.

Las relaciones sociales son esenciales para mantener la salud mental humana. Los perros y humanos logran establecer vínculos sociales entre si, ya que ambos ponen especial énfasis en las señales visuales, corporales y gestuales. En las especies gregarias el contacto con un compañero de grupo disminuye los efectos de un evento estresante.

En el caso del perro doméstico, las conductas afiliativas forman parte de las principales razones que explican el éxito del perro como animal de compañía. (Manteca, X. 2009)

La creación de vínculos sociales entre individuos se puede explicar como una conducta donde los individuos buscan la proximidad con otros individuos sin que haya una beneficio directo para el individuo excepto la recompensa que aporta esta conducta por si misma.(6)

Cuando los factores ambientales son óptimos se puede desarrollar un vínculo entre ambas especies, derivado de factores internos como los mecanismos hormonales y neurofisiológicos que regulan el comportamiento. En conjunto desarrollan una relación muy profunda de la que ahora se sabe que favorece el bienestar de ambas.

Las emociones forman patrones de activación fisiológica, cognitiva y conductual. La emoción es un proceso activador de la conducta del organismo. La emoción dirige el comportamiento hacia el individuo en sí. Se experimenta con lo que reconocemos como un “sentimiento”. Lo que sucede en el exterior activa el hipotálamo y se desencadena una excitación fisiológica de los órganos que corresponde a la experiencia emocional. Muchas personas consideran a sus mascotas como un miembro de la familia y la pérdida de una mascota significa tanto para ellos como la pérdida de un familiar o amigo (Cain, 1983; Beck y Katcher, 1996).

Las emociones que un perro vive son comparables, con las de un ser humano: negativas, que relacionamos con el miedo, la tristeza o ansiedad; o positivas como el cariño o la felicidad. En los cánidos y el hombre hay pautas de comportamiento muy complejas, desde el amor y la amistad, a la aflicción, la jerarquía, etc. y hasta en detalles mínimos son iguales. K. Lorenz, habla de las bases fisiológicas de las emociones y demuestra que dichas emociones pueden ser en esencia, idénticas entre los humanos y el resto de los animales sin pecar de antropomorfismo. (K. Lorenz. “A nivel sentimental los perros saben de nosotros lo mismo que nosotros sabemos de ellos. Mi perro sabe tanto de mi como yo de él”). Mecanismos de control Los mecanismos neurofisiológicos que controlan estas conductas son diversos. El contacto social deseado libera endorfinas, dopamina, oxitocina y disminuye la secreción de cortisol. Esto promueve un estado emocional positivo y ayuda a suavizar las emociones negativas. El contacto social es un mecanismo muy útil para disminuir la respuesta de estrés y para ayudar a enfrentarse más efectivamente a una situación potencialmente estresante.

La oxitocina es un polipéptido formado por 9 aminoácidos, que actúa, a nivel cerebral como neurotransmisor y a nivel periférico hormonalmente, en distintas zonas del SNC. La oxitocina tiene un papel fundamental en el establecimiento de vínculos afectivos entre animales que muestran una conducta gregaria.

Los estudios sobre la endocrinología de la vinculación humana han demostrado que los niveles de oxitocina en sangre se correlacionan con el apego maternal, la conducta de cuidados hacia el recién nacido, y con las respuestas neuronales hacia las señales infantiles en regiones como el cuerpo estriado, en el hipotálamo.

Es el neuropéptido más abundante en el hipotálamo y cumple funciones de integración, coordinación de procesos conductuales y fisiológicas. La investigación en animales sugiere que el sistema de oxitocina y sus tejidos diana son sensibles a la regulación en el desarrollo temprano de la conducta con consecuencias para toda la vida.(3) Actúa como modulador de la conducta maternal y afiliativa, la memoria social y la respuesta de estrés. Juega un papel crítico en distintas conductas sociales en mamíferos, como el reconocimiento de individuos de la misma especie, apego maternal y emparejamiento.(4)

El contacto social libera oxitocina en el núcleo paraventricular y en la amígdala central durante el estrés social reduciendo la ansiedad y inhibiendo la respuesta de estrés a nivel del eje hipotálamo-hipófisis-adrenal. También se relaciona con el control de emociones negativas (miedo y agresividad). La Oxitocina juega un papel importante en la atenuación de la respuesta de estrés y el reestablecimiento de la homeostasis.(6) Parece ser que la favorece a la disminución de la conducta agresiva.(2)

La Vasopresina también se sintetiza en el hipotálamo. Ambas, oxitocina y vasopresina se liberan a la circulación periférica y a otras zonas del SNC. Estos neuropéptidos se secretan como respuesta a una gran variedad de estímulos externos, estresantes tanto físicos (Ej. Restricción de movimiento) como psicológicos (Ej. Cambios en el ambiente).(3) Son candidatos a ejercer una influencia en las conductas sociales complejas a través de su interacción en las vías serotoninérgicas del hipotálamo.(7) Son los mismos péptidos y esteroides que están involucrados en la creación y mantenimiento del vínculo social los están implicados en el reconocimiento social.

En la mayoría de las especies de mamíferos, el proceso de reconocimiento social depende de las feromonas, que se detectan a nivel del órgano vomeronasal. Hay estudios que demuestran que la Oxitocina está implicada en la formación de la memoria social y la Vasopresina en el reconocimiento social, actuando en distintas zonas del cerebro. El papel que desempeñan estos péptidos en este tipo de aprendizaje y reconocimiento social parece que está influenciado por la actividad de las hormonas sexuales.(2)

La experiencia temprana, incluyendo la estimulación maternal, tiene consecuencias de por vida para el comportamiento y la psicología de los animales. Por ejemplo altos niveles de estimulación materna puede regular descendentemente el eje hipotalámico-pituitario-adrenal y afectar la expresión genética para la CRH (hormona corticotrópica) , vasopresina y/o sus receptores. Hay una evidencia que sugiere que la expresión de la oxitocina en ratas es regulada por el lamido maternal, acicalamiento y posiblemente tenga un papel importante en la conducta posterior y la reactividad del eje HPA.3

La Vasopresina, al actuar sobre los receptores de la amígdala y el septo lateral ejerce su efecto sobre la conducta agresiva, y la sensibilidad de la amígdala. La vasopresina parece que depende de la Testosterona de manera importante, así mismo la testosterona también regula los receptores para la vasopresina en el hipotálamo y facilita la conducta agresiva. La vasopresina favorece la conducta agresiva cuando actúa a nivel del septo lateral, pero disminuye esta conducta al actuar en los receptores del “Núcleo estriado terminal”; esto nos indica que la Vasopresina desempeña un papel modulador en la conducta agresiva.(2)

La Amígdala es una estructura neurológica diana de hormonas, interviene de manera crucial en la vigilancia y detección de estímulos relevantes como la amenaza. Está regulada tanto por la Oxitocina como la Vasopresina. La Oxitocina y la Vasopresina tienen efectos antagónicos en la Amígdala, mientras que la Oxitocina inhibe la Vasopresina excita distintas regiones del tronco cerebral como la substáncia gris periacueductal.(5) Así pues tanto la Oxitocina como la Vasopresina tienen efectos opuestos sobre la conectividad de la Amígdala con las regiones del tronco cerebral, ya sea directamente o mediante la interacción de las hormonas esteroideas, Testosterona y Estrógenos.

Los estrógenos y testosterona ejercen una influencia muy importante en la expresión de la oxitocina y la vasopresina en distintas regiones límbicos del cerebro.(8)

Los estrógenos estimulan fuertemente la producción y secreción de Oxitocina y mantiene sus efectos en el tiempo de forma más duradera en mujeres que en hombres, el aumento de Oxitocina está relacionado con un estado de tranquilidad y relajación.(9)

La testosterona puede aumentar la conducta de cuidados paternales debido a su conversión a Estrógenos, esto apoya la hipótesis de la regulación hormonal de esta conducta (6) La Testosterona disminuye el miedo y aumenta la motivación para actuar (activando el sistema nervioso simpático) y promover conductas para hacer frente a estas amenazas. Actúa junto con la Vasopresina y permite una respuesta más efectiva para hacer frente a las amenazas. En un ambiente seguro, Estrógenos y Oxitocina activan el sistema nervioso parasimpático que reduce el estrés. Mediante la acción inhibitoria que ejercen la Oxitocina y los Estrógenos sobre la Amígdala hay un mejor control cognitivo prefrontal de las regiones neuronales, lo que facilita el vínculo social, a través de los efectos directos de la Oxitocina sobre los sistemas de recompensa ligados a la Dopamina que se libera durante la interacción social. Después de una situación de estrés la Oxitocina facilita la reducción de la ansiedad y la respuesta del eje Hipotálamo-hipófisis-Adrenal para reestablecer la homeostasis. Los efectos de estas hormonas no son unidireccionales ya que algunas de ellas pueden servir a distintos propósitos en distintos ambientes, de tal manera que una ligera diferencia en el contexto puede producir distintos efectos en la conducta. Así pues la Testosterona y la Vasopresina son importantes en entornos que exigen una acción, especialmente cuando el individuo se enfrenta a desafíos sociales. La Testosterona incrementará la vigilancia y la motivación para actuar, ya sea por el efecto directo de la misma Testosterona o por su efecto sobre la Vasopresina. Mientras que la función de los Estrógenos y la Oxitocina se da más claramente en entornos seguros donde no se necesita una acción vigorosa directa; la Oxitocina tiene una importante función en el restablecimiento de la homeostasis, así como también reduce el miedo y facilita la vinculación social gracias al aumento de la proximidad entre individuos. La Testosterona y la Vasopresina promueven la capacidad de detectar y hacer frente a las amenazas mientras que la Oxitocina promueve la interacción con otros individuos.8

Después de la interacción positiva entre humanos y animales de compañía se ha visto que las concentraciones de Beta-endorfinas, Oxitocina, Prolactina, Beta-fenilalanina y Dopamina aumentan en ambas especies , mientras que los niveles de Cortisol disminuyen solo en la especie humana en el 2003, (en el 2006 un estudió reveló que diminuyen en ambas especies). Los cambios en las concentraciones plasmáticas de los neurotransmisores medidos son similares en humanos y perros. La Oxitocina se ha identificado como la hormona de la unión. Se ha observado que las concentraciones plasmáticas de Oxitocina aumentan en las uniones afiliativas en los topillos de las praderas. Generalmente la Prolactina inhibe la conducta sexual y promueve la conducta maternal, se han observado aumentos de los niveles de Prolactina durante las conductas sociales en pollos. Las concentraciones de Dopamina en sangre aumentan cuando el individuo experimenta sensaciones placenteras, en situaciones de alegría, en el macho durante la cópula, con la ingesta de comida y bebida; el aumento de Dopamina observado después de la interacción entre humanos y perros sugiere que esta acción aporta sensaciones placenteras. Los Glucocorticoides generalmente se liberan en situaciones de estrés, entonces cabría esperar un descenso de la concentración plasmática de Cortisol durante la disminución del estrés. Como mayor sea la necesidad de atención y más evidente sea el comportamiento social mayor éxito tendrá la unión entre el ser humano y el animal.

Los estudios de las conductas afiliativas en mamíferos (no humanos) sugieren que la serotonina juega un papel importante tanto durante el desarrollo del individuo como en la edad adulta. Los neuropéptidos, especialmente los opioides, la oxitocina y la vasopresina son candidatos a ejercer una influencia en las conductas sociales complejas a través de su interacción en las vías serotoninérgicas del hipotálamo.(7)

Algunos Estudios

1) Se ha revelado una pista sobre los mecanismos neuronales de asociación con los perros que afecta a la salud física y mental de los seres humanos. Se dice que los animales tienen estilos especies específicas de afecto. Este estudio sugiere que los humanos y los perros pueden tener un estilo común de unión, y esto puede explicar en parte por qué los perros pueden adaptarse a la sociedad humana. Las interacciones con los perros, especialmente aquellas iniciadas por la mirada del perro, pueden aumentar las concentraciones de Oxitocina en orina de sus propietarios como una manifestación de la conducta de apego. (10)

2) En el 2008 se estudió el comportamiento de los perros y los cambios de concentración de cortisol en una situación de juego, donde los perros juegan con su manejador durante 3 min con un juguete para jalarlo. En este experimento, los perros de trabajo se dividieron en dos grupos según el tipo de trabajo, perros policía y perros de guardia de la fronteras. Se encontró que las concentraciones de cortisol de perros policía aumentó significativamente, mientras que en los perros de guardia de fronteras los niveles hormonales disminuyeron, lo que demuestra que el jugar con el manejador tiene un efecto contrario en ambos grupos. Durante las sesiones de juego los oficiales de policía principalmente disciplinaban a sus perros, mientras los guardias fronterizos fueron realmente a jugar con ellos incluyendo conductas afectuosas (afiliativas).

El juego es una conducta característica de los animales jóvenes (Bekoff, 2001). que se compone de patrones de acción que se utilizan en diversos contextos, como la exploración, la manipulación, locomoción, la depredación, la lucha y el apareamiento (Hol et al., 1994) , o combinaciones de éstos (Loizos, 1966). Si se define estrés como la respuesta no específica del cuerpo a cualquier cambio (Selye, 1950), como un aumento en la actividad del eje HPA causado por cualquier estímulo físico, psicológico o ambientales (por ejemplo, Sapolsky et al., 2000) , entonces parece que el estrés ambiental puede tener un efecto inhibitorio sobre la expresión de la conducta de juego. Algunos estudios recientes han demostrado que la actividad de juego puede contribuir a la reducción de la tensión (Arelis, 2006).

3) Existe un estudio que indica que perros con mayores niveles de sociabilidad evaluada mediante una prueba conductual, miran durante más tiempo a la cara de un humano durante una situación de conflicto comparados con perros con baja sociabilidad. De este modo, la sociabilidad como rasgo del temperamento modula la emisión de señales comunicativas. Incluso algunas evidencias indican que la mirada a la cara esta vinculada con la liberación de la hormona relacionada con el apego, oxitocina.

Daniel Mills de la Universidad de Lincon evaluó la mirada de los perros hacia los propietarios. El rostro de los humanos cuando presenta alguna emoción no es simétrico ya que un lado tiende a mostrar más la emoción debido a que la gesticulación es más marcada del lado derecho por lo que el humano tiende a mirar hacia el lado izquierdo. Por el objetivo del estudio era averiguar si el perro hacía lo mismo que el humano y mediante una serie de imágenes de caras humanas, caras de perros y objetos inanimados, se dieron cuenta que el perro mira en el centro los a los perros y objetos pero al mirar a las caras de los humanos de igual forma, primero mira el lado izquierdo de la cara del humano . Ningún otro animal posee esa relación con el humano. Ni si quiera lo hace con los miembros de su propia especie. Los perros son capaces de entendernos de una forma que ninguna otra especie lo hace.

Los etólogos se han dado cuenta que la mirada del perro expresa el ofrecimiento de establecer un verdadero vínculo emocional con el ser humano. Lo que los propietarios de los perros han intuido siempre resulta ser cierto: solo existe un animal capaz de comunicarse con nosotros al mismo nivel. “A través de su mirada nos abre su interior y a partir de nuestras reacciones, saca conclusiones sobre nuestros pensamientos y sentimientos, de una manera parecida a como lo hacen también los niños.” Según el investigador de perros Ádám Miklósi, es la diferencia decisiva entre el perro y el lobo. (12)

4) En la universidad de Eötvös Loránd, Budapest, Hungría se estudió la relación entre humanos y perros. El Dr. Adam Miklosi estudió el ladrido del perro en distintos escenarios como forma de comunicación. Realizó varias grabaciones de los ladridos y posteriormente se los presento a un grupo de personas para evaluar que tanto podían determinar la emoción del perro. Las personas pudieron diferenciar 6 tipos de ladridos y determinar el estado de ánimo del perro. Se piensa que los perros al pasar por el proceso de domesticación fueron modificando la forma en que vocalizan para poderse comunicar mejor con nosotros, ya que los lobos prácticamente no ladran. (12)

5) Desde cachorros los perros, los perros disponen de una capacidad que otros animales aprenden mucho más lentamente (si es que llegan a aprenderla) saben interpretar de forma espontánea los gestos humanos y de señalización. Miklósi hizo estudios al respecto. Durante la convivencia con el hombre el perro ha desarrollado una cualidad que lo diferencia de sus antecesores salvajes: es capaz de mostrar interés sin sentir miedo. El investigador Brian Hare lo explica: “La inteligencia canina empezó a evolucionar desde el momento en que sustituyeron el recelo de sus antepasados por la curiosidad y la tolerancia. El nicho biológico del perro es la amistad con el hombre”.

La antropóloga americana Pat Shipman, profesora de la Universidad de Pennsylvania sostiene que los seres humanos son la única especie biológica que se rodea de animales de forma sistemática, sin tener en cuenta si le son útiles o no. Esta conexión tiene la misma importancia que lo fue para el hombre primitivo el uso de herramientas y lenguaje. Tener animales por motivos emocionales no es ningún fenómeno reciente fruto de una sociedad opulenta.

6) Pero el lazo que existe entre humano y perro puede llegar a ser más profundo de lo que se pensó así que en Suiza la Profesora Kerstin Uvnas-Mobery en el Instituto de Karolinska estudia el lazo que se crea entre las madres y sus bebés recién nacidos Ella explica que existe una liberación de la hormona oxitocina producida en el hipotálamo, la cual ayuda a la madre a establecer sentimientos positivos que crean el estrecho lazo entre ambos. Y cada que lo amamanta se libera esta hormona. Por lo que se realizó una investigación entre el perro y su propietario comparándolos con el lazo más fuerte que se conoce actualmente. El experimento consistió en tomar muestras de sangre de propietario y perro antes y durante la interacción de una sesión de caricias entre ambos. El resultado fue que sorprendentemente el pico de oxitocina que se obtuvo durante la interacción fue similar al observado entre las madres que amamantan a sus hijos. Y este pico aparece tanto en el propietario como en el perro. “Ambos se tocan, escuchan y miran”. Esto posee un efecto fisiológico muy poderoso ya que reduce la presión sanguínea y los latidos del corazón por lo que se reducen los nivele de estrés”. La Profesora Kerstin Uvnas-Mobery afirma que tener un perro alarga la vida debido a que se tienen menos probabilidades de padecer un ataque cardiaco y si se padece un ataque cardiaco se tiene de 3 a 4 veces más probabilidades de sobrevivir si tienes un perro que si no lo tienes.

Hay una liberación de la oxitocina producida en el hipotálamo, la cual ayuda a la madre a establecer sentimientos positivos que general el lazo. Cada vez que la madre amamanta a su hijo se libera oxitocina de forma pulsátil. En un estudio se tomaron muestras de sangre al propietario de un perro y al perro antes y durante la interacción de una sesión de caricias entre ambos. El resultado fue que el pico de oxitocina se obtuvo durante la interacción y fue similar al observado en las madres que amamantan a sus hijos. Este pico aparece tanto en el propietario como en el perro.

7) Dra. Juliane Kaminski del Max Planck Institute en Alemania. Estudia la psicología cognitiva del perro y señala que “Hay tareas que el perro puede realizar pero el chimpance no”. Los perros responden a las señales y parece ser muy natural para ellos. Pueden incluso leer la dirección de los ojos y son habilidades que solo emplean con los humanos. Betsy, una perrita Border Collie a los 7 años sabía más de 340 palabras y podía distinguir objetos por su nombre. La propietaria le fue enseñando una palabra nueva por semana a partir de los 4 meses de edad. Este estudio fue publicado en la revista National Geographic en marzo 2008.

Como Betsy también esta Chaser otra perrita Border Collie que distingue entre más de mil peluches diferentes y los saca de una montaña de juguetes según se van nombrando. Brian Hare argumenta que “aunque los chimpancés y los bonovos poseen un cerebro más grande y son genéticamente más parecidos a los perros les encanta cooperar con los humanos”. Han sido causa de varias publicaciones. Su vocabulario ahora oscila las 1022 palabras. Es el perro con el más amplio vocabulario hasta ahora.(23)

Terapia Asistida con Animales

Historia En 1792 William Tuke, médico en Inglaterra, fundador del “Retiro de York”, consideraba que los tratamientos de las personas con patologías mentales no debían basarse en castigos o azotes (como lo establecía el modelo de atención a estos pacientes), sino que debería comprender un tratamiento “más humano”. Tuke observó cómo la dependencia de un animal pequeño hacia uno de sus pacientes propiciaba el autocontrol. Fue entonces que notó que la interacción entre seres humanos y animales producía efectos positivos en la vida de los primeros. Así que animó a los pacientes a realizar actividades tales como leer, escribir, explorar los jardines, usar ropa normal (en contraposición a los uniformes), y el cuidado de los animales. Alimentar animales generaba socialización, placer y promovía la recuperación. Incluyó animales de granja, como gallinas y conejos en los tratamientos de sus pacientes; de esta manera revolucionó el modelo de atención a las personas con patologías mentales sostenido en aquella época, y lo humanizó a través de una naciente Terapia Asistida por Animales.

En 1867, Bielfield Alemania en el Centro destinado al tratamiento de personas con epilepsia Bethel, incluyeron animales de compañía en el tratamiento de los pacientes. En la actualidad, dicho Centro se ha convertido en un Instituto que recibe a 5000 pacientes aproximadamente con distintas patologías, ya sean físicas o psíquicas que asisten a tratamientos en los que se incluyen activamente a los animales como perros, caballos y gatos, donde el cuidado de los mismos es el punto principal. (Schaefer, 2002)

En 1944 La Cruz Roja Americana desarrolló un programa especial de rehabilitación para aviadores que incluía animales en el “Army Air Force Convalescent en Pawling”, Nueva York. Este programa contemplaba la interacción con los animales como ayuda a la rehabilitación de los aviadores. En particular, se observó que el contacto con los animales amortiguaba los intensos procesos terapéuticos. (Schaefer, 2002) (7)

En 1953, Boris Levinson, Psiquiatra y su perro, Jingles dieron un paso fundamental, en ese momento, Levinson llamó “Facilitación Social”, más tarde conocido como Terapia Asistida por Animales, o AAT (Fawcett y Gullone, 2001). Muchos consideran que gracias al aporte de Levinson este tipo de tratamiento pudo sostenerse en el tiempo, y pudo extenderse y evolucionar. Levinson afirma que fue Jingles quien le mostró que los animales podían ser beneficiosos para el tratamiento de sus pacientes. Y relata la experiencia en su libro "Psicoterapia Infantil Asistida Por Animales", en el que relata las experiencias vividas junto a Jingles (un coterapeuta muy entusiasta) y sus pacientes introvertidos que perdían todas sus inhibiciones y miedos gracias a la presencia del perro en el consultorio, ya que éste favorecía la comunicación entre el psiquiatra y sus pacientes. El libro se publicó en 1969.

En 1966. Erling Stordahl, un músico invidente decide fundar el “Centro Beitostolen”, en Noruega, destinado a la rehabilitación y el tratamiento de personas invidentes y con distintas discapacidades. El objetivo de incluir a los animales en el tratamiento consistía en que principalmente estos animales estimularan a los pacientes a ejercitarse.

Durante las décadas de los ´60 y los ´70, la investigación en lo que hace a Terapias Asistidas por Animales comienza a tomar relevancia y muchos estudios arrojan resultados positivos. Se descubre en especial, que el contacto con los animales reduce la presión arterial y equilibra la frecuencia cardiaca, como así también los niveles de ansiedad y estrés que puedan presentar las personas. Entre dichas investigaciones, se destacan los trabajos realizados por Sam y Elisabeth Corson en el Hospital de la Universidad Estatal de Ohio, quienes comenzaron a indagar en este ámbito al observar que la mayoría de los pacientes que interaccionaban con los animales lograron mejoras en lo relacionado a su comportamiento introvertido.

En 1977 se funda Delta Society en Estados Unidos, una organización que se dedicó a llevar adelante investigaciones serias dirigidas a fundamentar por qué los animales son importantes para los seres humanos, y específicamente cuál es el impacto que éstos presentan en la salud y el bienestar humanos.

Años más tarde, un número importante de investigaciones comenzó a demostrar los beneficios o efectos positivos que se obtienen como resultado en la relación humano-animal. Hoy en día, Delta Society es la primera fuente de información nacional sobre Terapia Asistida por Animales y Actividades Asistidas por Animales y servicios animales.

Durante la última década se ha vuelto más ampliamente aceptada la tenencia de mascotas y animales en la Terapia Asistida y la educación puede tener una multitud de efectos positivos en los seres humanos. En las Interacciones Humano-Animales (HAI) se obtienen beneficios para: la atención social, el comportamiento social, las interacciones interpersonales y el estado de ánimo, los parámetros relacionados con el estrés, tales como la frecuencia cardíaca, cortisol y la presión arterial, una percepción de miedo y ansiedad y la salud mental y física, especialmente las enfermedades cardiovasculares.

Existen pruebas limitadas sobre los efectos positivos de la HAI en: reducción de estrés relacionados con parámetros tales como la epinefrina y la norepinefrina, la mejora del funcionamiento del sistema inmunológico y control del dolor, aumento de la fiabilidad y la confianza hacia otras personas; agresión reducida; empatía mejorada y un mejor aprendizaje. Se piensa que la activación del sistema de la oxitocina, desempeña un papel clave en la mayoría de estos efectos indicados psicológicos y psicofisiológicos. La activación del sistema de la oxitocina no sólo proporcionan una explicación, pero también permite una visión integradora de los diferentes efectos de HAI.

En niños que reciben Terapia Asistida con Animales, se ha observado que los individuos que reciben este tipo de terapia existe una reducción significativa en la ansiedad, la agitación y el miedo. Este estudio (Carie Braun , Teresa Stangler , Jennifer Narveson, Sandra Pettingell . Animal-assisted therapy as a pain relief intervention for children Complementary Therapies in Clinical Practice 15. 2009) muestra evidencias que la Terapia Asistida con Animales puede ser un método efectivo para reducir el sufrimiento en niños. La reducción del dolor experimentado dentro de los 15 minutos de interacción con los perros para estos niños es comparable al uso de paracetamol oral. Esta reducción del dolor puede ser explicada por la acción que tiene la interacción con mascotas sobre la modulación de una respuesta psiconeuroendocrina. La exposición a una mascota favorece la liberación de endorfinas, que inducen a una sensación de bienestar, así como también a una liberación de linfocitos, que aumentarán la respuesta inmune. Los marcadores fisiológicos como la disminución de la frecuencia cardíaca y respiratoria, la disminución de la presión sanguínea y el aumento de la temperatura de la piel son indicativos de la disminución del Sistema Nerviso Simpático y la activación del Parasimpático, lo que indica una respuesta de relajación.

Los animales de compañía ofrecen el apoyo social a los pacientes con cáncer, quienes dicen que la presencia de un animal de compañía reduce sus temores, la desesperación, la soledad y el aislamiento, y les permite adaptarse a sus situaciones extremadamente difíciles. (Muschel, 1984).

En 1980 se llegó a la conclusión que las personas que poseían una mascota tenía un tercio de tasa de mortalidad que los que no tenían. La enfermedad cardiaca coronaria es una enfermedad relacionada con el estrés, los investigadores han sugerido que el efecto protector de una mascota es debido a su efecto sobre los factores de riesgo psicológicos (Patronek y Glickman, 1993). Por lo tanto, al reducir el estrés y mejorar la salud mental, los animales de compañía pueden hacer que sus propietarios tengan más probabilidades de sobrevivir. (Friedmann, 1995). Esta evidencia del poder de las mascotas para influir de forma positiva en esta enfermedad mortal a través de la mejora de la salud mental comenzó una investigación dedicada al estudio de los beneficios de los animales de compañía para la salud humana. (11)

Beneficios a la salud

Las investigaciones recientes sugieren que el apoyo social en los seres humanos y los comportamientos de afiliación en algunos animales puede proporcionar un amortiguador contra el estrés y tener un impacto positivo en las medidas de salud y bienestar.(1) Los perros pueden desempeñar un tratamiento terapéutico así como promover la salud a largo plazo. La compañía de los perros también se ha asociado con el "alivio de la depresión y una mayor autoestima" (Martin & Farnum, 2002) (7)

En 1994 La Asamblea Popular Nacional y de la Encuesta mascotas -primer estudio nacional para investigar la relación entre la tenencia de mascotas y la salud humana-. (Headey, 1999). Los resultados indicaron que los dueños de perros tenían mejor salud mental y física que los no propietarios. Hacían un menor número de visitas al médico anual y eran menos propensos a tomar medicamentos para el corazón o para dormir. (11)

Friedmann y colaboradores fueron pioneros en el campo de la determinación de la fisiología de la interacción positiva entre seres humanos y animales. Los parámetros fisiológicos registrados fueron los cambios en la presión sistólica y diastólica, niveles de colesterol y triglicéridos en sangre las respuestas de conductancia en piel. Otros indicadores usados, síntomas de los cambios fisiológicos del sistema nervioso autónomo., fueron ansiedad y disminución del estrés.

Amplían la cantidad y la calidad de las relaciones interpersonales necesarias para el equilibrio emocional. La mayoría de las familias que tienen animales en casa demuestran ser más felices y pasar momentos más divertidos.

Las actividades diarias de las personas, con dificultades, como comer, caminar, asearse etc. se mantienen por más tiempo de promedio en aquellas que viven con animales. Reducen la tensión en personas hipertensas y previenen la aparición de afecciones cardíacas al acariciarlos o pasearlos. Y los pacientes hipertensos que se medican tienen menos riesgo de accidente cardiovascular cuando conviven con un animal de compañía, ya que disminuyen el estrés.

Los propietarios de mascotas tienen más probabilidades de sobrevivir a un posible ataque cardíaco. Se acude menos al médico, acelera la recuperación a enfermedades y nos ayudan a practicar ejercicio y mantener buena salud física y mental. Los niños que estuvieron en contacto durante su primer año de vida a una mascota, tienen menor incidencia de rinitis alérgica y asma. Los niños puntúan mejor en los tests psicológicos de empatía y orientación social que los que no tienen.

La compañía de animales ayuda a que los niños se enfrenten mejor con enfermedades graves o la muerte de algún familiar. Aumentan el contacto social y verbal, y facilita la realización de ciertas terapias. Su presencia durante el examen físico en el pediatra disminuye el estrés. Son un buen escudo contra el sentimiento de soledad y desesperación.

El contacto diario con animales desarrolla la creatividad, la curiosidad y el aprendizaje en los niños y favorece el bienestar psicológico. Fomentan la responsabilidad y el respeto por otros seres vivos y personas ya que ellos no discriminan y los hacen sentir útiles. Aumenta la autoestima de los niños, adultos y ancianos, porque al tocar y hablar con ellos se desarrolla el sentimiento de afecto y la seguridad en sí mismos. Pueden fortalecer y mejorar los resultados en cualquier programa de disfunción cognitiva en niños o ancianos.

Los niños que tienen animales se muestran más participativos y activos en el deporte, hobbies o pertenecen a algún club o asociación. Los animales son la mejor fuente de apoyo y refuerzan el sentido de autosuperación ante situaciones adversas de la vida. Los niños autistas tienen más conductas sociales preactivas y se muestran menos encerrados en sí mismos. Los enfermos de VIH que tienen animales de compañía se sienten menos depresión y sufren menos estrés.

Las relaciones sociales son esenciales para mantener la salud mental humana, sin embargo, a penas comienza el entendimiento de los mecanismos cerebrales implicados en el desarrollo y el mantenimiento de los lazos sociales. Los modelos animales son herramientas poderosas para la investigación de los mecanismos neurobiológicos que regulan los procesos cognitivos los cuales conducen al desarrollo de las relaciones sociales y de esta forma permiten potenciar la comprensión de la conducta humana y canina.

Bibliografía:

1) Eddie A.M. Bokkers. Effects of Interactions Between Humans and Domesticated Animals. 2006 Springer. Printed in the Netherlands

2) Marguerite O’Haire. Companion animals and human health: Benefits, challenges, and the road ahead. El Sevier. 2010

3) C. Sue Carter. Developmental consequences of oxitocina. Physiology & Behavior 79 (2003) 383–397 (11)

4) Suzanne C. Miller, Cathy Kennedy, Dale DeVoe, Matthew Hickey, Tracy Nelson and Lori Kogan. An Examination of Changes in Oxytocin Levels in Men and Women Before and After Interaction with a Bonded Dog. Anthrozoos Volume 22, Issue 1 pp.31-42

5) D. Huber, P. Veinante, R. Stoop, Vasopressin and oxytocin excite distinct neuronal populations in the central amygdala, Science 308 (2005) 245– 248 (10)

6) M. Engelmann, R. Landgraf, C.T. Wotjak, The hypothalamic-neurohypophysial system regulates the hypothalamic–pituitary–adrenal axis under stress: an old concept revisited, Front. Neuroendocrinol. 25 (2004) 132–149. (20)

7) Thomas R. Insel and James T. Winslow. Serotonin and Neuropeptides in Affiliative Behaviors. BIOL PSYCHIATRY 1998;44 :207–219 (30)

8) Peter A. Bos, Jaak Panksepp, Rose-Marie Bluthé, Jack van Honk. Acute effects of steroid hormones and neuropeptides on human social–emotional behavior: A review of single administration Studies. Frontiers in Neuroendocrinology 33 (2012) 17–35 (24)

9) Suzanne C. Miller, Cathy Kennedy, Dale DeVoe, Matthew Hickey, Tracy Nelson and Lori Kogan. An Examination of Changes in Oxytocin Levels in Men and Women Before and After Interaction with a Bonded Dog. Anthrozoos Volume 22, Issue 1 pp.31-42 (29)

10) Miho Nagasawa , Takefumi Kikusui , Tatsushi Onaka , Mitsuaki Ohta . Dog's gaze at its owner increases owner's urinary oxytocin during social interaction. Hormones and Behavior 55 (2009) 434–441

11) Marguerite O’Haire. Companion animals and human health: Benefits, challenges, and the road ahead. El Sevier. 2010

12) Revista GEO núm 309: Fiel, comprensivo y obediente, el perro es el animal más compenetrado con el hombre.

13) Horwitz D, Mills D, Heath S. Manual de Comportamiento en Pequeños Animales . (2006) España.

14) Manteca X. Etología Veterinaria del Perro y el Gato. 1ª edición. (2009) España


AUTOR: MVZ Cert. MSC Georgina Rumbos Santoyo, Clínica Veterinaria del Bosque, México

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